El servicio del vino en el restaurante

Servicio es una palabra genérica que engloba multitud de conceptos que podrían resumirse en una sola idea: servir es cuidar. Es una tarea tan intangible como transcendental que se lleva a cabo siguiendo una liturgia y que impacta sobremanera en la experiencia del cliente. No en vano, un vino bien servido no solo sabe mejor, sino que sienta mejor.

El sumiller excelente debe dominar la decantación o la recomendación. De igual manera, debe ser un buen anfitrión, tener dotes de comunicación que le permitan ofrecer los vinos de la mejor manera, seducir e inspirar a los clientes con sus recomendaciones, ser preciso en la toma de comandas, verter vino en la copa con elegancia o al jarrear una botella, llevar a cabo un preciso seguimiento de cada mesa, garantizando una atención continuada, tener suficiente cintura para resolver las quejas, comprender que el servicio no se acaba hasta facturar y despedir al último cliente y, finalmente, llevar a cabo todas las tareas de cierre del servicio.